La llave del equilibrio físico y mental
1. Estado de un cuerpo cuando fuerzas encontradas sobre él se compensan.
2. Situación de un cuerpo que se mantiene sin caerse.
3. Peso que es igual a otro y lo contrarresta.
4. Contrapeso, contrarresto o armonía entre cosas diversas.
5. Ecuanimidad, mesura y sensatez en los actos y juicios.
6. Estado de una partícula si la suma de todas las fuerzas que actúan sobre ella es cero.
7. Estado en el que se encuentra un sólido rígido si las sumas de todas las fuerzas que actúan sobre él y de todos los momentos de las fuerzas que intervienen son cero.
8. Actos de contemporización, prudencia o astucia, encaminados a sostener una situación insegura o dificultosa.
No hay duda de que el equilibrio tiene relación con el hecho de contrarrestar fuerzas, de llegar a un punto neutro de armonía en donde el efecto de toda fuerza, tanto "positiva" como "negativa", se vea compensado para no producir alteración ninguna.
A través de mi experiencia he podido verificar que el equilibrio físico y mental es una consecuencia directa de los siguientes dos grandes bloques:
Si te pregunto: ¿Te sientes equilibrado? Seguramente me dirás que no.
Y con seguridad también me dirás: “Tengo circunstancias complicadas, mucho estrés, cosas que no puedo controlar, cuando pase esta fase estaré mejor, etc”.
Y yo te digo: “No hay y no habrá equilibrio hasta que no se cuiden estos dos bloques”.
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